El primer rompecabezas de la historia se creó en el año 1760, un hecho fortuito de las manos de un creador de mapas, John Spilsbury, quien “sin querer” creó el primer puzzle al montar un mapa de Europa.

Y ahora, siglos después, seguimos teniendo la imagen mental de dos personas mayores con lentes acomodando piezas de rompecabezas. Aunque es un hobbie vintage, hay pruebas contundentes de que tienen más beneficios que otros hobbies. 

Veamos algunos de ellos.

Permite resolver problemas cotidianos

Aunque el rompecabezas sea un juego, en esencia tiene las mismas características que cualquier problema en la vida cotidiana. Para hacer frente a cualquier dificultad es preciso observar, identificar el problema, comparar y encontrar una solución; y claro que la paciencia es clave.

Permite el desarrollo de la paciencia

Los rompecabezas requieren de tiempo. Separar las piezas por colores y las de las orillas es sólo el inicio. Así que este hecho, simple en apariencia, contribuye a desarrollar la increíble habilidad de la paciencia.

Incrementa la concentración

Para encontrar piezas y recordar dónde acomodarlas es necesario concentrarse. Este ejercicio, por lo tanto, aumenta la capacidad de enfocarnos en una tarea.

Disminuye el estrés

Al concentrarnos en armar el rompecabezas, la respiración se regula. Entre más disfrutemos de esta actividad, más contentos y relajados podemos sentirnos. Si eres de las personas que se desesperan al armar un puzzle, si lo vuelves un hábito, tal vez puedas mejorar tus niveles de frustración y aumentar la paciencia.

Ejercita la memoria

Recordar la imagen que construiremos es esencial. Por eso los rompecabezas son muy útiles para incrementar la memoria, especialmente, la visual.

En pocas palabras, no es sólo un juego. Si deseas cultivas todos estos beneficios, da click AQUÍ, ya que Sanborns tiene el rompecabezas perfecto para ti.

FOTO: Imagen de Hans Braxmeier en Pixabay