Mientras el planeta siga repleto de seres humanos, las historias de amor se seguirán escribiendo y reescribiendo, una y otra vez, y es que el amor es para todos. A pesar de que la inclusión sigue siendo un tema debatible según muchos grupos conservadores., Heidi Ewing consigue reflejarla fielmente en su nueva película I Carry You With Me o Te llevo conmigo. 

A partir del brutal guion de Ewing y Alan Page Arriaga, esta cinta nos cuenta la historia protagonizada por Armando Espitia y Christian Vázquez. Se trata de una pareja de hombres gays viviendo en Puebla, en la década de los noventas, cuando el tema de la orientación e identidad sexual seguía siendo un tabú mucho más fuerte del que todavía se vive en muchos sitios y familias de nuestro país. 

Iván (Armando Espitia) busca convertirse en un chef, pero las oportunidades laborales en su pueblo están en su contra. Al mismo tiempo, busca la manera de convivir más tiempo con su hijo. En una noche de fiesta conoce a Gerardo, profesor de quien inmediatamente se enamora. La química entre ambos permite que la historia avance por sí misma, hasta que la realidad los atraviesa. En busca de una mejor oportunidad, Iván cruza la frontera ilegalmente de los Estados Unidos, dejando atrás todo y a los dos amores de su vida, a su hijo y a Gerardo. 

Por el contrario de lo que pareciera, no se trata de la típica historia de amor gay en la que uno es condenado a muerte, o algún otro castigo moral. Sin embargo, el plot twist lo encontramos en el desenlace de la película, en donde la producción de la cinta tomó grandes decisiones de edición y archivo para enterar al espectador de algo que sólo en el momento de estar sentado en la butaca vale la pena enterarse. 

Bajo la dirección fotográfica de Juan Pablo Ramírez, encontramos grandes recursos narrativos visuales en donde los personajes se dibujan a partir de sus diferentes contextos, como de sus inquietudes y sueños propios. Juan Pablo desenreda la complejidad de una visión dividida entre dos fronteras, en donde México y Nueva York protagonizan the american dream desde la  nostalgia, la precariedad y las injusticias de un mundo gobernado por una moral y economía inalcanzable para las minorías. 

La represión y discriminación son el eje de la cinta, sin perder de vista el amor y la crudeza en la que un contexto somete a sus personajes a no poder ser quienes son, hasta no dejar de un lado grandes sacrificios y decisiones importantes detrás. 

Una historia de amor que no termina en tragedia, y que en realidad no termina. Una historia de amor que se cuenta a partir de las raíces morales de una sociedad en donde ser quien eres puede condenarte, desde tu orientación sexual hasta tu pasaporte. 

Ahora disponible en cartelera, Te llevo conmigo ha sido merecedora de críticas positivas en cuanto a todos los elementos de su producción cinematográfica: actuaciones, guion, dirección, edición y fotografías. 

Te llevo conmigo es una cinta que retrata las fronteras como cadenas que nos limitan a ser quienes en verdad somos. Encontrar el amor y vivirlo libremente, encontrar un sueño y poder vivirlo libremente, ¿cómo nos permite el mundo ser quienes somos entre tantas fronteras morales, políticas y económicas? 

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